El verano está a la vuelta de la esquina, y es muy probable que ya estés preparando unas merecidas vacaciones, donde la playa suele ser uno de los destinos más habituales Pero, ¿te puedes llevar la tablet o es mejor dejarla en casa?

Pues lo cierto es que la playa no es el lugar idóneo para usar un dispositivo electrónico. Por un lado está la arena y el agua que pueden dañar al dispositivo. Y por otro, no nos podemos olvidar del calor, un factor muy importante.

Así debes cuidar tu tablet en la playa

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Tranquilo, que si quieres llevarte tu tablet a la playa lo podrás hacer sin problema alguno.

Eso sí, sigue estos trucos y consejos para evitar que tu preciado dispositivo sufra algún tipo de daño.

Aparta tu tablet del sol

Nuestra estrella preferida es uno de los grandes enemigos de cualquier dispositivo electrónico.

Principalmente porque puede provocar problemas de sobrecalentamiento que se traducirá más pronto que tarde en el fallo de algún componente.

Y seguramente no querrás que tu preciada tableta se convierta en un caro pisapapeles.

Tranquilo, que la solución es tan sencilla como intentar evitar en la medida de lo posible que el sol le dé de forma directa.

No pasa nada si el dispositivo está un rato al sol, pero mejor prevenir que curar.

Cuando no la estés utilizando puedes dejarla debajo de una toalla para que no se caliente tanto.

La arena y el agua son tu peor enemigo

El sol puede dañar tu dispositivo, pero el agua y la arena son dos elementos que tampoco debes obviar en absoluto.

En el caso del agua, si se moja la tablet seguramente acabe por dejar de funcionar.

Puedes tener suerte y que el dispositivo aguante unas semanas o incluso unos meses.

Seguramente se esté oxidando por dentro hasta que algún componente termine fallando.

Y algo parecido pasa con la arena. Para empezar, se puede colar por cualquier rendija de tu tableta, haciendo que el puerto de carga deje de funcionar, por poner un ejemplo.

También puede pasar que acabe por rayar la pantalla. Por suerte, la solución es tan simple como comprar una funda impermeable o incluso usar un poco de cinta para cubrir los puertos.

Además de evitar que la tablet toque la arena o se acerque al agua para evitar sustos innecesarios.

Cuidado con los robos

A los amantes de lo ajeno les encantan los dispositivos electrónicos. Y es probable que aprovechen que te estás dando un chapuzón para llevarse tu gadget.

Para evitar esta situación, ten siempre la tablet a la vista y, cuando la guardes, hazlo de forma disimulada y en un lugar de difícil acceso.

En MÁSMÓVIL queremos que disfrutes de tu tablet donde quieras y sin tener que preocuparte por el agua o la arena. Así que estos trucos y consejos te irán de perlas. Si quieres información sobre nuestras ofertas, llámanos gratuitamente al 900 696 301 o consulta nuestra web.

Y tú, ¿sueles llevarte tu tablet o móvil a la playa?