La imaginación no tiene límites y las ocurrencias humanas a veces tampoco. Hemos encontrado algunos 'gadgets' sin los que podríamos vivir perfectamente pero que nos consiguen sacar una sonrisilla.

¿Cuánto te fastidia llegar a casa con ganas de ir al baño y? que ¡no hays papel higiénico!?  Pues la tecnología tiene la solución para que esta terrible situación no se repita. Se trata de un soporte inteligente para el papel capaz de detectar cuándo queda poco en el rollo gracias a un sensor de infrarrojos. Cuando empiece a parpadear la luz del soporte sabremos que queda poco para que se agote. Pero por si somos más despistados aún, también nos enviará un mensaje al smartphone. Este invento es un proyecto de Kickstarter y por el momento todavía es sólo eso, un proyecto que no se sabe si saldrá al mercado.

Otro acto muy cotidiano es tomar café al despertarnos. Pues bien, imagina que según te suena el despertador la cafetera ya está en marcha para que no des un solo paso sin tu dosis de cafeína mañanera. No imagines tanto y fíjate en el diseño de Joshua Renouf llamado El Barisieur. Este aparato es un despertador que hace las veces de cafetera. Sí, todo a la vez. Tú dejas preparado por la noche la leche y el café y cuando suene la alarma escucharás a tu lado el burbujear del agua hirviendo y el contundente olor de la cafeína. Eso sí, si no duermes solo quizás a tu acompañante tanto olor y burbujeo mañanero no le guste tanto.

El café sabe mucho mejor con algo de comida. Untar todas las mañanas esa aburrida tostada, cuando no quemada, puede ser cosa del pasado. Echa un vistazo a esta web donde las tostadas se convierten en obras de arte cada mañana. Esta empresa puede hacer que tu tostadora marque un corazón, una frase, una fecha e incluso tu propia cara en el pan de molde. Si verte el careto cada día en el espejo no te asustaba lo suficiente, prueba a  comértelo en una tostada, te despiertas seguro.

Con tanto estrés desde primera hora de la mañana, seguro que luego pasas el día cansado. ¿Cuántas veces vas en el metro o esperando al bus y te apetece sentarte pero no hay sitio? Como decíamos antes, la imaginación no tiene límites, por lo que si tu sentido del ridículo tampoco los tiene puedes utilizar la silla que se lleva pegada al cuerpo. Con el nombre de Chairless Chair, la compañía Noonee presenta una silla sin forma de tal, que te permite sentarte en cualquier lugar simplemente agachándote. Para ello tienes que llevar una estructura que va desde la cadera hasta los tobillos (un poco ortopédico) y que al doblar las rodillas se acopla a la forma del cuerpo y otorga la resistencia suficiente como para poder sentarse o simplemente apoyarse para acabar el día con menos cansancio.

Imagen: Science and Invention magazine cover, 1928