La IP es una dirección que está formada por un conjunto de reglas que tienen como objetivo identificar la comunicación a través de la red. De hecho, el significado de IP es “dirección de protocolo de internet”. Esta identificación es importante porque aparece cuando se envía cualquier tipo de dato, independientemente de si es un archivo multimedia o una dirección de correo electrónico. La función de la IP es identificar a ese dispositivo.
¿Cómo saber cuál es mi IP?
La dirección IP es un dato que se puede obtener de diferentes maneras, aunque todo depende del sistema operativo que tenga el usuario. Aun así, siempre se recomienda recurrir al método más rápido que es ingresar en una web especializada. Además, estas páginas son libres y gratuitas y aspectos como el sistema operativo no influyen al localizar la IP en poco tiempo.
El único inconveniente es que este método solo sirve para encontrar una IP pública, que es el tipo de IP más habitual y más recomendado para navegar por internet. Pero también hay sistemas para encontrar una IP privada, que es la que sirve de identificador para acceder a sistemas como el wifi que ha contratado un usuario y que tiene una contraseña concreta.
Para saber cuál es mi IP privada hay que entrar en los ajustes o en la pestaña de información del propio sistema y pulsar en las secciones de “configuración, en red e internet y después en ver las propiedades de la red”. Además, al acudir a esa sección también aparecerá la IP del propio ordenador.
¿Qué diferencia hay entre una IP estática y dinámica?
La gran diferencia entre una IP estática y dinámica es que mientras que una se mantiene siempre con los mismos caracteres, la otra cambia con el paso del tiempo.
De hecho, la IP que cambia es la dinámica, que varía cada vez que un usuario se conecta a internet. También puede cambiar según establezca el protocolo de configuración dinámica del host que aporta datos como la propia dirección IP de una red o los enlaces que permiten acceder a ella.