Los smartphones pueden sufrir todo tipo de averías: golpes, daños por humedad o problemas varios de hardware son los más habituales. En la red abundan los trucos y tutoriales aparentemente milagrosos para reparar nuestros smartphones. Aunque suelen ser muy desaconsejables, muchas veces nos damos cuenta cuando ya es tarde.
Siempre puedes intentar tips básicos por tu cuenta, pero cuando las soluciones pasan por usar productos de limpieza, desmontar piezas o realizar acciones que parecen mentira, la cosa cambia. Vamos a repasar algunas de las "soluciones milagro" para reparar móviles que es mejor evitar.

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Enterrar el móvil mojado en arroz
- Mito: la idea de sumergir un móvil mojado en arroz se popularizó hace años y todavía persiste. Se ha repetido tantas veces que muchos lo consideran un método infalible.
- Realidad: eso no evita la corrosión interna ni repara los daños provocados por el agua. Además se ha demostrado que puede hacer más complicada la intervención profesional y empeorar la situación.
Aplicar calor
- Mito: colocar el móvil al sol, usar un secador o acercarlo a una estufa para eliminar humedad o incluso revivir baterías agotadas.
- Realidad: el calor extremo afecta gravemente a las pantallas modernas y a las baterías de litio, reduciendo su vida útil e incluso provocando deformaciones peligrosas.
Quemar el borde de la pantalla para eliminar la raya verde
- Mito: uno de los mitos más arriesgados consiste en aplicar fuego o calor directo a un lateral del teléfono para eliminar líneas verdes o verticales en la pantalla. Estas líneas suelen indicar un problema interno del panel OLED o de sus conexiones.
- Realidad: esto destruye el panel y puede causar daños irreparables en otros componentes.
Congelar el móvil para recuperar el rendimiento
- Mito: se dice que el congelador arregla problemas de rendimiento o bloqueos.
- Realidad: el choque térmico provoca condensación interna, lo que puede generar cortocircuitos o daño directo en la placa base. No existe ninguna base técnica que respalde esta práctica.
Pasta de dientes y bicarbonato para quitar arañazos
- Mito: se crre que el uso de pasta de dientes o mezclas abrasivas elimina microarañazos de la pantalla. Este mito viene derivado de la reparación casera de DVDs rayados, que en ocasiones daba buen resultado.
- Realidad: estos productos erosionan las capas protectoras y pueden empeorar la superficie. También pueden estropear la experiencia táctil. La única solución real pasa por cambiar el cristal o aplicar un protector que oculte los daños.
Dar golpes para arreglar fallos internos
- Mito: pequeños golpes al móvil contra la mesa para solucionar fallos de sonido, botones atascados o desconexiones internas.
- Realidad: aunque un movimiento pueda recolocar temporalmente un conector suelto, lo habitual es que el impacto cause daños mayores o rompa piezas internas. El mito es una herencia de dispositivos electrónicos que se reajustaban temporalmente con un golpetazo.

La realidad detrás de estos mitos
Lo que todos estos métodos tienen en común es la promesa de una solución rápida, barata y sencilla. Pero la realidad es que los móviles actuales son dispositivos complejos y sensibles, máquinas perfectamente diseñadas.
Por tanto, utilizar remedios improvisados no solo no arregla los problemas, sino que puede convertir una avería menor en una reparación mucho más cara e incluso volver inutilizable el dispositivo. La opción más segura siempre será acudir a un técnico especializado que pueda realizar un diagnóstico real y darnos la solución más adecuada.
Desde MASMOVIL esperamos que te haya resultado interesante conocer los mitos que lejos de arreglar un smartphone pueden dañarlo seriamente. Te recomendamos buscar información contrastada antes de intentar cualquier "remedio milagroso" con tu móvil.