Los hackers que se infiltran en equipos ajenos, ya sea por diversión, por dinero o por motivos políticos, cada vez tienen más sencillo desencriptar contraseñas, especialmente si estas son débiles. Por eso, conocer los métodos de hackeo más usados es imprescindible para protegerte.
¿Cómo lo hacen?
Para lograr acceder a tus datos y a tu información personal, los ciberdelincuentes necesitan obtener tus credenciales de acceso, es decir, tus nombres de usuario y contraseñas.
Esto lo consiguen usando métodos que les ayudan a identificar cuáles son estas credenciales, como programas informáticos especiales, ataques de acceso y otras vías que repasamos, y que debes conocer para protegerte ante ellas.
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Métodos más usados por los hackers
Estos son los sistemas más usados por los ciberdelincuentes para hacerse con tus credenciales de acceso a los servicios o plataformas que utilices.
Phishing
Una de las técnicas más comunes para hacerse con tus datos. Consiste en enviar correos electrónicos falsos que simulan ser de una entidad legítima, como un banco, una red social o un servicio online. Estos correos te piden que ingreses a un enlace para verificar tu cuenta, actualizar tus datos o resolver algún problema.
Sin embargo, el enlace te lleva a una página web falsa que imita la original, donde te piden que introduzcas tu usuario y contraseña. Si lo haces, los hackers capturarán tus datos y podrán acceder a tu cuenta real.
Keylogging
El método más usado por los hackers consiste en instalar un programa malicioso en tu ordenador o dispositivo móvil que registra todo lo que escribes en el teclado, incluyendo tus contraseñas.
Los delincuentes pueden enviar este programa por correo electrónico, por mensaje de texto o a través de algún link de descarga. Una vez instalado, el programa envía la información capturada a los hackers, que pueden usarla para acceder a tus cuentas.
Ataques de fuerza bruta
Esta técnica consiste en probar diferentes combinaciones de letras, números y símbolos hasta dar con la contraseña correcta. Los hackers usan programas automatizados que pueden realizar miles de intentos por segundo, aprovechando las debilidades de las contraseñas simples o predecibles.
Por ejemplo, si tu contraseña es "123456", "qwerty" o "password", es muy probable que los hackers la descubran en poco tiempo.
Ingeniería social
Un hacker puede manipular o engañar para que otra persona revele sus contraseñas voluntariamente. Esto puede conseguirse haciéndose pasar por alguien de confianza, como un amigo, un familiar o un técnico de soporte, y pedir que des tu contraseña por algún motivo.
También pueden aprovecharse de tu curiosidad o tu generosidad y ofrecerte algo a cambio de tu contraseña, como un regalo, un premio o una donación.
Robo presencial
Los delincuentes también se aprovechan de la falta de seguridad física de tu ordenador o dispositivo móvil y acceder directamente a él para obtener tus contraseñas. Los hackers pueden robar tu ordenador o dispositivo móvil cuando lo dejas desatendido o desbloqueado, o pueden acceder a él cuando lo usas en un lugar público o compartido.
También pueden usar dispositivos externos, como memorias USB o discos duros, para copiar tus archivos o instalar programas maliciosos.
Cómo protegerte
Como ves, los hackers tienen muchas formas de robar tus contraseñas y acceder a tus cuentas online. Por eso, es importante que tomes algunas medidas de precaución para proteger tu información personal y evitar ser víctima de estos ataques.
- Usa contraseñas seguras: elige contraseñas que sean largas, complejas y únicas para cada cuenta. Usa una combinación de letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos. Evita usar palabras comunes, nombres propios o fechas importantes. También puedes usar un gestor de contraseñas que te ayude a crear y recordar tus contraseñas.
- Cambia tus contraseñas con frecuencia: no uses la misma contraseña durante mucho tiempo ni la reutilices en diferentes cuentas. Cambia tus contraseñas cada cierto tiempo y especialmente si sospechas que han sido comprometidas.
- No compartas tus contraseñas con nadie: no le des tu contraseña a nadie ni la escribas en ningún lugar visible o accesible. Tampoco uses la opción de recordar contraseña en los navegadores web ni en las aplicaciones móviles.
- Verifica la autenticidad de los correos electrónicos y las páginas web: no abras ni respondas a correos electrónicos sospechosos ni hagas clic en enlaces o archivos adjuntos que no reconozcas. Comprueba que la dirección del remitente sea legítima y que el contenido sea coherente y sin errores. También verifica que la dirección de la página web a la que accedes empiece por el protocolo https:// y tenga un candado verde en la barra de navegación.
- Protege tu ordenador y tu dispositivo móvil: instala un antivirus y un firewall en tu ordenador y actualiza el sistema operativo y las aplicaciones regularmente. También activa el bloqueo de pantalla y el cifrado en tu dispositivo móvil y usa una red Wi-Fi segura cuando te conectes a internet.
- Sé precavido: no te fíes de ofertas demasiado buenas para ser verdad ni de personas que te pidan información personal o financiera por cualquier medio. Si tienes dudas, consulta con la entidad o persona supuestamente implicada o busca información en fuentes fiables.
En MÁSMÓVIL estamos seguros de que siguiendo estos consejos básicos ninguna persona logrará hacerse con tus credenciales privadas.