Hoy en día muchos sistemas funcionan con el traspase y con la gestión de datos. Estos procedimientos pueden llevar a errores que provoquen que esos sistemas no funcionen de un modo totalmente adecuado. Para evitar y corregir esos errores existen técnicas como el scrubbing, que, además, se trata de un recurso muy habitual.

¿Qué es Scrubbing o depuración de datos?

El término scrubbing en español significa depuración de datos. Se trata de una técnica que se basa en la corrección de los errores que puedan estar en los datos que circulan a través de un sistema. Además, esta tarea se realiza en un segundo plano para que el resto del sistema pueda ejecutar sus funciones con total normalidad.

La tarea que lleva a cabo el scrubbing se basa en buscar los errores, analizarlos y finalmente corregirlos. El objetivo final de la limpieza de datos es evitar que se acumulen los errores corregibles, mientras que se reducen las probabilidades de que aparezcan aquellos que no pueden tener una solución.

Scrubbing: Desmitificando el proceso de limpieza y protección contra ataques DDoS

Uno de los ataques más potentes que se detectan en el sector de la seguridad informática es el de los DDoS, estas amenazas actúan sobre los sistemas de los ordenadores provocando que sus usuarios legítimos no puedan acceder a ellos con normalidad. Muchos sistemas a pequeña y a gran escala recurren al Scrubbing para evitar que esos ataques provoquen daños irreparables.

A pesar de que el scrubbing puede utilizarse como una técnica que ayude a reducir los efectos de los ataques DDoS, no es una herramienta infalible contra ellos. Hoy en día las grandes corporaciones o los gobiernos utilizan herramientas más potentes, e incluso muchos de esos ataques tienen un seguimiento policial que deriva en una investigación en la que los ciberdelincuentes son detenidos.