Hasta la fecha, nadie ha podido toser a Whatsapp en el segmento de los servicios de mensajería. La aplicación es líder en Occidente con 430 millones de usuarios mensuales. Sólo le supera WeChat gracias al tirón en su país de origen, China, donde cuenta con 500 millones de usuarios. WhatsApp, sin embargo, no es número uno en todos los países. En Estados Unidos le supera Facebook Messenger; en Corea, KakaoTalk, y en Japón triunfa Line, un servicio que ya ha superado los 300 millones de usuarios en los 193 millones de países en los que está presente.
Aunque WhatsApp es un servicio de suscripción, los usuarios no han desertado hasta la fecha de una aplicación que se ha convertido en casi imprescindible porque es la que usan la mayoría de nuestros contactos. De hecho, su uso crece a buen ritmo. En los últimos dos meses ha sumado 30 millones de usuarios a un servicio que gestiona diariamente 50.000 millones de mensajes.
Telegram: características
Los usuarios siguen fieles a WhatsApp a pesar de que hay decenas de alternativas gratuitas. La última que busca su hueco es Telegram, que ofrece un servicio de mensajería instantánea muy similar al de WhatsApp. De hecho, hasta la estética (con su doble check en verde) nos recuerda a la popular aplicación. Sin embargo, Telegram tiene un aspecto diferencial que le convierte en una alternativa muy atractiva: la privacidad.
La gran ventaja de Telegram es que permite mantener chats secretos. Cuando se opta por un chat secreto, la conversación entre emisor y receptor se transmite encriptada y no se almacena en los servidores de la compañía, algo que no ofrece su competidor. Además, en esta modalidad de conversación cualquiera de los participantes puede establecer el tiempo en el que quiere que se autodestruya el chat (desde dos segundos hasta 1 semana) en ambos móviles, una funcionalidad que recuerda la de la aplicación Snapchat, que tanto éxito ha tenido entre los jóvenes estadounidenses, hasta el punto de que Facebook ofreció a sus fundadores 3.000 millones de dólares por la compañía, una oferta que rechazaron estos veinteañeros.
Telegram, que se lanzó en agosto, permite crear grupos de hasta 200 personas, compartir vídeos de hasta 1 Gb, y enviar imágenes tanto de nuestro carrete como de la web. Los mensajes se almacenan en la nube, por lo que son accesibles desde cualquier dispositivo. Y, según sus creadores, Telegram es y será siempre gratuito. "No tenemos planes de vender anuncios o introducir tarifas de suscripción", aseguran.
En España, Telegram se encuentra en estos momentos en lo más alto de las tiendas de aplicaciones gratuitas para Android (ha superado ya los 5 millones de descargas) como para dispositivos Apple. Su fundador, el ruso Pavel Durov (fundador de la mayor red social de su país) asegura que España es el primer país en número de usuarios en Europa.