De acuerdo, las gafas de Google son alucinantes, pero? solo unos pocos elegidos pueden disfrutar de ellas, al menos por ahora. Pero? ¿Qué tal un reloj inteligente o, como dicen por ahí, un smartwatch? Sí, yo también arrugué la frente al leer este palabro, pero creedme, pronto será tan normal como decir smartphone. O teléfono inteligente.
Aunque se trata de una tecnología que todavía está lejos de tener una forma definitiva, la curiosidad o el ansia de estar a la última nos pueden hacer querer tener una de estas pequeñas maravillas hoy mismo. Mientras llega el iWatch de Apple ?dicen que será el año que viene-, los modelos disponibles por ahora usan Android, si bien se nutren de una gama específica de aplicaciones creadas específicamente para estos dispositivos. Veamos lo que ofrece el mercado.
El Smartwatch de Sony puede tener un nombre poco original, pero su diseño lo compensa con creces. Es discreto y funcional, pero desde luego no se parece en nada a un reloj clásico, así que el factor "cool" está garantizado. Además de poder usar todas las aplicaciones de Google Play, sus usuarios dispondrán de otras doscientas más firmadas por Sony que irán apareciendo poco a poco. Sus creadores afirman que es "una versión en miniatura de tu smartphone", y que es capaz de alertarnos con una vibración en la muñeca de las llamadas, mensajes o notificaciones que lleguen a nuestro móvil. Muy útil para el cine, reuniones, restaurantes, conciertos? Su precio es de 129 euros.
Su sucesor, el SW2, llegará en pocos días y anuncia mejoras importantes: cuerpo de aluminio, conectividad NFC y Bluetooth 3.0, lo que le da capacidad para actualizar Twitter, Facebook y controlar a distancia otros dispositivos como una cámara de fotos. Aún no se sabe su precio.
Un poco más geek y con más posibilidades de personalización es el Peeble, que nació como un proyecto Kickstarter. Por 150 dólares se puede comprar a través de su página oficial, donde presentan todas sus características: aplicaciones para ciclistas, múltiples maneras de presentar la hora en la pantalla, notificación de emails y llamadas entrantes, acelerómetro? y tiene una gran ventaja: su batería dura siete días, contra los tres del Smartwatch.
Otro gigante, Samsung, está a punto de presentar su esperado Galaxy Gear. Poco se sabe de esta apuesta de los coreanos, excepto que contará con avances parecidos a los del SW2: conectividad NFC para sincronizarlo con otros dispositivos y una función especial para localizar el reloj en caso de pérdida. Por cierto, aún no se sabe si correrá bajo Android o si utilizará un sistema exclusivo de Samsung.
Por último, el Cookoo parece concebido como un complemento para el móvil más que como un smartwatch independiente. Sus mejores bazas solo están disponibles a través de una aplicación de la store de Apple, así que los poseedores de un iPhone o iPad se familiarizarán pronto con su funcionamiento. Funciona con una clásica pila de botón y clásico es también, a simple vista, su aspecto. Pero ofrece todas las prestaciones que sus competidores y tiene un precio parecido: unos 130 dólares.
Con este tipo de dispositivos, cada vez va a ser más fácil llevar encima un equipo digno de un agente secreto. Aunque muchos de los gadgets de este tipo parecen ideados más para ser vistos por los demás que para ser ocultados.