'Password',' 1234' o 'iloveyou' son algunas de las contraseñas más utilizadas en Internet, y también las más fáciles de descifrar. Es lógico que, con la cantidad de consignas que nos tenemos que aprender al cabo del año, tendamos a usar password sencillos de recordar. Pero ésta no debería ser la solución. Si quieres evitar a los hackers y virus varios que pululan por la red, anota estas recomendaciones:
Cuanto más difícil sea nuestra contraseña, mucho mejor
Para crear un password que te proteja de piratas informáticos que buscan ansiosos información de usuarios, deberás utilizar números, letras, símbolos, mayúsculas y minúsculas en contraseñas largas. Es importante que no uses, para este fin, ninguna referencia a tu fecha de cumpleaños, a tu número de teléfono ni a cualquier detalle que pueda relacionarse contigo. Y no repitas password para varias cuentas importantes. Si quieres proteger tu correo y, quizá, el acceso a tu perfil en alguna red social que te interese, crea contraseñas diferentes. Y no descartes actualizarlas periódicamente.
Configura las opciones de recuperación de contraseña
Ponte en situación: se te olvida el password y necesitas restaurarlo enviándote un mail al correo electrónico que diste cuando te abriste el perfil en esa página en concreto. Éste es un método para restablecer tu contraseña, aunque no es el único. Google aconseja, por ejemplo, utilizar el número de teléfono para recibir un código que te permitirá reactivar tu contraseña. Según dicen, "es un método de identificación más seguro que la dirección de correo electrónico", pero también es cierto que son muchos los que recelan de esta fórmula y prefieren guardarse para sí su número de móvil. En este caso, quizá tengas que elegir y responder a una pregunta que te proponga el sitio en cuestión. Si la página te ofrece la opción de plantear tú mismo la pregunta aprovecha y elige una que sólo tú sepas la respuesta, algo personal quizá. Eso sí, intenta que la respuesta sea fácil de recordar porque si te lo pones muy difícil y fallas en la contestación quizá no puedas volver a acceder a tu cuenta.
Si no te queda muy claro, presta atención a este vídeo tutorial:
Regístrate siempre en sitios seguros
Parece de Perogrullo, pero te sorprenderías conocer la cantidad de gente que ha sufrido un ataque de pirateo online por meterse dónde no debe. Es importante que cuando naveguemos por algún Marketplace o por nuestro banco online comprobemos que estamos operando con un sistema HTTPS (protocolo seguro de transferencia de hipertexto). Mucho cuidado con acceder a este tipo de páginas en ordenadores públicos, ya que es posible que haya cerca un 'keylogger' funcionando, que no es otra cosa que un programa que usan los 'hackers' para capturar contraseñas a través de las pulsaciones del teclado. Otro detalle a tener en cuenta es revisar las condiciones de registro de las web en las que te metas y las cookies, ya que la información que el navegador de tu ordenador envía a la página viene cuando la web usa cookies de terceros.
Si puedes, utiliza un firewall o cortafuegos
Y si ya le sumas un buen antivirus tendrás la mejor armadura para tu ordenador. Y, si tienes críos en casa lo mismo necesitas también un filtro para evitar que accedan a ciertas páginas.
Descargar aplicaciones
Aunque creamos que bajarnos app a través de las tiendas oficiales sea seguro, muchas veces no es así. El problema es que no existe un control fijo sobre los usuarios que crean y/o suben esas aplicaciones a la tienda, y por lo tanto puede pasar que te descargues una app y, además, metas en tu teléfono a un extraño que puede acceder a tu ubicación, a tu información sobre la conexión wifi y a tus archivos multimedia. Esta situación se da, sobre todo, cuando compartes un wifi público con más gente? Y si no te lo crees, mírate este vídeo que explica cómo hackear las conversaciones de Whatsapp de tus ¿amigos?