Los selfies son tan 2.0. Ni siquiera el dichoso el polémico palito conseguía reanimar una moda cuya duración ha sido proporcional al furor que desató. Dicen que una llama dura menos cuando arde con más fuerza, y si en algún contexto esto es verdad es en el mundo de las aplicaciones y aún más en el de las redes sociales. Además, también dicen que cuando todo mundo sigue una moda es el momento de cambiarla. Y para eso acaba de llegar Dubsmash, una nueva manera de exhibirse (otros lo llaman comunicarse) ante nuestros amigos y conocidos, con la ventaja añadida de que ni siquiera tenemos que hablar ni pensar qué decir. Solo gesticular.

El éxito de esta nueva aplicación es innegable: son ya más de 10 millones las descargas que acumula esta creación de tres alemanes ?Jonas Druppel, Roland Grenke y Daniel Taschik-. La gracia consiste en hacer playback sobre un clip de video de hasta 20 segundos. Este video corto puede ser el fragmento de una canción, una frase célebre, o incluso ruidos y efectos de sonido. Como no podía ser menos, ya circulan infinidad de antologías de los mejores Dubmash (¿?) por youtube, facebook, whatsapp y demás almacenes virtuales de vídeos superfluos.

Su uso es tan simple que ha sido inevitable que millones de personas se hayan decidido a descargar esta aplicación y un grabar sus propias interpretaciones de grandes diálogos de la historia del cine, estribillos pop o frasecillas de moda, buscando en lo más profundo de su reserva de talento artístico. Los agobios disponibles están organizados en categorías como acción, fantasía y ciencia ficción, comedia, películas, y terror entre otras. Si bien es cierto que esta última categoría podría englobar a todas las demás, es cierto que el menú facilita encontrar la faceta en la que el usuario volcará su inspiración. Elegido el audio, uno deberá grabarse asimismo sincronizando sus labios y acciones de acuerdo con el sonido. El resultado es supuestamente hilarante, simpático, romántico o inspirador. En su favor hay que decir que pocas veces encontraremos al Chavo del Ocho y a Martin Luther King en una misma aplicación.

El resultado es parecido a lo que supondría convertir al formato .gif unos cuantos selfies, pero con sonido. De momento, donde realmente ha triunfado es en los países iberoamericanos, en donde se han hecho famosos los clips de una abuelita comentando un partido de fútbol o los de algunos famosos imitando a otros famosos. Lo malo es que la supuesta gracia o la capacidad de sorpresa quedan anuladas cuando vemos que el libro en cuestión se repite en bucle una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez. Otra temible posibilidad que ofrece Dubsmash es que todas estas creaciones se pueden difundir fácilmente a través de cualquiera de las redes sociales o aplicaciones de mensajería instantánea.

Sus desarrolladores la describen como "una manera divertida de comunicarse", aunque no queda muy claro hasta qué punto puede resultar divertido o cuánto de comunicación hay en gesticular sobre unos segundos de audio. Sin embargo, no han tardado en aparecer autodenominadas "Dubstars" que ponen todo su entusiasmo en este karaoke para gente poco exigente.